Hay distintos tipos de créditos que las instituciones privadas y las empresas de gobierno ofrecen a las personas. Desde tarjetas de crédito hasta créditos automotrices. No obstante, aunque la población conoce los préstamos más comunes, existen algunos otros que, a pesar de generar grandes beneficios, no son tan conocidos entre la mayoría de la gente.
Justo esto sucede con el crédito refaccionario, un apoyo crediticio dirigido a las actividades agropecuarias, forestales, pesqueras y todas aquellas relacionadas al medio rural.
Un crédito refaccionario es un préstamo que se le otorga a personas físicas o morales con el fin de satisfacer las necesidades propias de su actividad productiva: sobre todo en lo relacionado con reposición o sustitución de maquinaria y equipo.
Crédito refaccionario, dirigido a actividades rurales | Fuente: Unsplash
Cada institución, pública o privada, establece sus propios términos para otorgar un préstamo de este tipo; empero, aquí revisaremos algunos detalles del crédito refaccionario que las autoridades mexicanas ofrecen a través de la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero.
Esta empresa pública financia proyectos integrales de renovación refaccionaria. Aporta hasta el 80% de los recursos necesarios para adquirir y/o reacondicionar la maquinaria que se utiliza en cualquier actividad rural.
Así pues, si tú solicitas el préstamo, la Financiera lo valorará y tú podrías ahorrarte un muy buen dinero, toda vez que en algunos casos tendrías que aportar sólo el 20% del capital necesario para el proyecto.
La Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero aporta hasta el 80% de los recursos que necesitas | Fuente: Unsplash
La liquidación del crédito solicitado puede establecerse en un plazo que va desde uno hasta 15 años; y la garantía del mismo serán los propios bienes adquiridos con los fondos otorgados.
Requisitos para solicitar el crédito refaccionario
- Estar al corriente en sus pagos con otros acreedores (según Buró de Crédito).
- Contar con proyecto de inversión técnica y financieramente viable.
- Contar con garantía hipotecaria y/o prendaria y/o líquida y/o combinación.
- Presentar la Documentación Necesaria para la Atención de Solicitudes de Crédito.
Para conocer las comisiones exactas y todos los detalles, acude directamente al sitio web de la Financiera.
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